Después de un tiempo en el que he andado un poco ocupada ya os iré contando en qué, cambio de imagen y muchas ganas de seguir moviéndonos. Voy a compartir con vosotros algunas de las cosas que me han tenido apartada del teclado del ordenador.
Lo primero, quiero agradecer a Anna Llenas cuyas maravillosas ilustraciones me enamoraron por completo. Y de quien he escogido dos cuentos para realizar un taller de inteligencia emocional con cuentacuentos. El cuento de que os hablaré hoy es Vacío. Las dinámicas que he creado para este cuento las encontraréis en la sección de proyectos del blog (en la parte inferior de la página de portada), por si a alguien le interesan para aplicarlas.
La primera vez que leí Vacío me enamoró, quedé prendada de esas maravillosas ilustraciones de esa historia sencilla y aún así llena de significado. Pero fue solo después de haberle dedicado un tiempo para trabajar con él en el taller de inteligencia emocional, que me fui dando cuenta de todo su potencial, así es casi siempre. Al primer vistazo las cosas nos pasan desapercibidas, no somos capaces de ver la profundidad, hasta dónde llega. Sino hasta que le dedicamos un buen rato, a reflexionar sobre ello.
Me capturó Julia, la niña feliz que perdía algo. Cuántas veces perdiste algo, y sentiste un gran vacío. Cuántas veces sentiste que ese agujero jamás podría llenarse, que nada ni nadie en este mundo podría hacer que ese “vacío” que había en tu interior desapareciese.
Cuántas veces en tu día a día te preguntas ¿qué te pasa?, ¿qué te está pasando?, intentas llenar ese vacío con un montón de cosas igual que Julia, relaciones tóxicas, comida, mascotas, plantas, drogas y alcohol, materialismo indiscriminado, ¿cambia algo? ¿Te hace sentir distinta? ¿Sientes que eres más feliz? No siempre está tan claro lo que hemos perdido, hay pérdidas claras muertes de seres queridos, cambios de trabajo, de domicilio, incluso de ciudad y país, dejando atrás a nuestros familiares y amigos, separaciones, divorcios. Esas serían pérdidas muy claras en nuestras vidas, pero hay veces que lo que hemos perdido no está tan claro, y lo mismo que Julia sentimos un gran vacío en nuestro interior que no sabemos cómo llenar.
Sentir esa tristeza, identificarla y a continuación escuchar que nos está diciendo, igual que Julia en el cuento, prestarnos un poquito de atención, y dar un paso más allá. Escogí este cuento porque es un canto a la vida.
La resiliencia, una habilidad emocional muy importante bajo mi punto de vista. Ser capaces de ver y aprender lo bueno que hay en los aprendizajes que menos nos gustan en la vida. La conexión con los demás a través de nuestro interior, lo que podemos compartir, el crecimiento que experimentamos a nivel personal, cuando nos aventuramos en nuestro interior.
En resumen, no hay fracasos, tan sólo aprendizajes. Y la resiliencia nos invita a “ver” lo que las situaciones difíciles vienen a traernos no a quitarnos.
La valentía de mirar dentro de nosotros mismos, y no temer lo que veremos, sino que muy al contrario, grandes cosas están ahí esperando a ser manifestadas. Este momento triste, sólo es una oportunidad para pararse y preguntar ¿Qué me pasa? ¿Qué he perdido?
Gracias Anna, por tus libros.
Gracias María, por hablarme de él.
Gracias Carol, por apoyarme.
Gracias Paco, tú ya sabes por qué.
Me encanta, es una historia muy de los tiempos q vivimos, en algun momento d nuestra vida, nos hemos sentido asi, como narra la historia, Vacio.gracias Sagrario. Besos
Me gustaMe gusta
Muchas gracias sagrario! En algún momento de nuestra vida hemos sentido la emoción del vacío, se siente cuando tus hijos no están ya en casa , cuando te faltan tus padres, cuando te sientes a veces sola , y está rodeada de tu familia pero en la distancia, lo bueno es reconocer esta emoción para mirarla a la cara y hacernos con ella. Es parte de la vida, un beso muy grande, muchas gracias , me encanta como lo narras. 😘
Me gustaMe gusta
En la teoría, la resiliencia es muy fácil de comprender, pero en la práctica para nada lo es, sobre todo en esos primeros momentos en los que todo lo ves negro….. vamos de víctimas tirando balones fuera (por cierto que eso en general a los humanos se nos da muy bien), y es curioso como un sencillo y aparente básico cuento llama tu atención, paras, observas, sientes y ¡zas! diana.
Que bueno haber compartido el taller en vivo y directo, un regalo.
Gracias a los dos.
Me gustaMe gusta
Muy interesante la charla que nos ofreciste anoche al Club de Lectura de Madridejos sobre Inteligencia Emocional y tu dinámica sobre el vacío que en ocasiones afecta a la existencia de cualquier ser humano. Te deseo mucha suerte en este nuevo camino que emprendes. Un beso.
Me gustaMe gusta